¿Qué va a ser de 'Secret Story' sin Adara? Nada. La audiencia a preferido ver una falsa carpeta entre Luca Onestini y Cristina Porta ante la persona que más ha dado juego en el reality aun entrando más tarde que el resto. El reality tejió muy bien su plan estratégico: récord de votaciones en el duelo entre Cristina Porta y Adara Molinero con la expulsión de la segunda, una final adelantada y el beso que tanto se esperaba entre el italiano y la periodista.
Cristina Porta se separó de Adara porque se dio cuenta de que no le gustaba como persona ni sus actitudes. Además la calificaba como una gran experta en realitys que sabía jugar muy bien sus cartas. Cristina, ¿quién es la verdadera experta en realitys? No lo dudes, eres tú. La concursante se ha montado una historia de amor que ha sabido explotar a cada minuto y que ha dado su culmen con el beso a Luca justo el día de antes de su expulsión. ¿Casualidad? No lo creo.
Cristina se ha montado su propia película. Un beso mejor montado que las telenovelas turcas que tanto están de moda ahora y con miradas cómplices hacia las cámaras, hacen ver que la periodista sabe con firmeza que será la ganadora de 'Secret Story', aunque si alguien le preguntara se haría la loca como hace siempre para apartar las miradas.
Pero la pregunta es fácil. ¿Habría habido beso si Cristina no hubiese estado nominada? Tú mismo sabes la respuesta. Si no hubiese estado en la cuerda floja junto a Adara, "la reina de los realitys", la periodista habría estirado más el chicle hasta la final para hacerse con un hueco en ella. Pero esta gran batalla ha hecho que este proceso se acelere y ha hecho que Cristina apostara por hacer su mejor estrategia y lo ha conseguido.
Pero a 'Secret Story' le interesa esta falsa historia. Luca prometió a la audiencia que si su alma gemela se salvaba dormirían juntos y desnudos. Una estrategia que hace unos años no se habría permitido por manipular a la audiencia. Pero, ¿por qué no le han dicho absolutamente nada? Fácil. Al concurso le interesa tener a sus espectadores divididos para que así haya un mayor movimiento en las votaciones y para que Luca y Cristina acabasen ya con ese tonteo infinito que parecía no tener final.
¿Por qué volvió Adara repescada a la casa tras ser expulsada una semana antes? Al reality le interesaba. No por colocarla como ganadora sino por alimentar la historia que Cristina había creado con ella para así ganar el concurso. Sabían que Adara les daría lo que buscaban y no se han confundido. Ahora con ella fuera de juego, solo les queda "la pareja del momento" que exprimirán hasta el final. No queda mucho más que ver, un esperado 'edredoning' que posiblemente llegue cuando uno de los dos se vea con la soga al cuello en alguna expulsión o ya en la recta final del programa para alzarse con la victoria.
¿Y ahora qué? Acarrear con las consecuencias. Hasta el final del reality solo nos quedarán imágenes de dos personas sobándose y siguiendo un papel más que estudiado. Menos mal que aún está Miguel Frigenti dentro de la casa, otro frente abierto de la periodista, y que aún puede salvar el concurso, aunque con su nominación esta semana puede acabar en la calle como su gran amiga.
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