Jordi Martín: "Trabajar en 'Cazamariposas' lo es todo para mí, es una familia. Gracias
- Redacción
- 5 mar 2018
- 9 Min. de lectura
Jordi Martín tiene una larga trayectoria como paparazzi. Dio el salto a la televisión tras el culebrón de Luis Rollán. Estuvo pasándose por los platós dándose a conocer. Concursó en la ‘Sálvame Snow Week’ de la cual fue expulsado. Nuria Marín confió en él y le metió en su programa ‘Cazamariposas’ en el cual colabora actualmente.

ENTREVISTA
¿Cómo llegaste a saber que querías ser paparazzi? El mundo de la fotografía le llevo en las venas. Mi padre era un fotógrafo muy conocido en España a nivel deportivo. Yo vivía en Ibiza. Trabaja en ‘Pachá’ y una noche me llamaron para hacerle unas fotos a Leonardo DiCaprio y me pagaban un sueldecito al mes, un sueldo normal. Recuerdo que esa noche le hice las fotos y al terminar mi trabajo pensé: voy a esperar aquí en la salida para hacerle unas fotos saliendo de aquí. Esas fotos se vendieron en 9.000 dólares. Pensé: ¡ostias! ¿Cómo es posible que en una noche haya ganado lo que cobro en ‘Pachá’ en toda una temporada? Este tiene que ser mi trabajo. A raíz de esto empecé a hablar con agencias internacionales y como yo vivía en Ibiza era la mejor plaza para dedicarme a ello.
¿Cómo se lo tomaron tus familiares? Mi padre no muy bien porque él detestaba el mundo del corazón. Él veía el mundo del deporte, que no tiene nada que ver. Siempre quiso que yo tomara el relevo de él en el deporte pero a mí no me acababa de llamar la atención. ¿Qué personaje te lo ha puesto más difícil para realizar tu trabajo? Creo que Gerard Piqué, cuando empezó la relación con Shakira. Éramos unos niños los dos. Él siempre ha sido un egocéntrico y un prepotente. Cogía el coche y se lo tomaba como un: “a mí no me vais a perseguir” y se ponía por el centro de Barcelona a 180 por hora y yo también lo hacía. Aquello era como una locura, teníamos un pique brutal, llegamos a las manos en varias ocasiones. Con el tiempo se ha normalizado, nos vimos hace poco y nos saludamos, él iba con los niños, todo súper bien. Ahora en televisión cada vez que puedo le defiendo, la relación es buena.
¿Cómo es tu relación actual con Gustavo? A la espera de un juicio.
¿Crees que su relación con María Lapiedra durará muchos años? No, para nada. Gustavo siempre había tenido muy buena reputación en nuestro mundo y se la ha cargado, pero fulminantemente. A parte, él se tiene que estar dando cuenta que no se habla con familiares muy muy cercanos a él, la relación con sus compañeros de programa va a peor, en las revistas tiene una increíble mala reputación. El tema María… ella es una manipuladora, le está utilizando. Cuando este tema no dé para más María le dará la patada, eso lo tengo clarísimo.
¿Cómo llegaste a trabajar en ‘Cazamariposas’? Me llamaron ellos. A raíz del culebrón con Luis Rollán, que estuve en ‘Sálvame’ todo el verano. Como ‘Cazamariposas’ es un programa que se hace en Barcelona, me llamó Nuria Marín, la directora y me preguntó si me gustaría empezar a colaborar allí. Desde entonces aquí estoy. Empecé a ir un día por semana, luego dos y ahora estoy tres.
¿Qué es para ti trabajar en ‘Cazamariposas’? Trabajar allí lo es todo, es una familia. Para mí trabajar en ‘Cazamariposas’ no es simplemente un programa en el que trabajo, es un proyecto que tengo que me lo he tomado muy enserio. Tengo una implicación en el programa que ellos me hacen sentirme importante. La calidad humana que hay es brutal (recalca). Para mí Nuria Marín es una persona… el otro día le llamé por teléfono y se lo dije, es importante en mi vida. Mi círculo suele ser cerrado, bastante cerrado y Nuria entra en mi círculo, mi círculo cercano (recalca). Cuando a mí me expulsaron de la ‘Sálvame Snow Week’, La Fábrica de la Tele me dio un tiempo para reflexionar, meterme en un centro, curarme, etc. Nuria fue la que insistió, quería que volviera. Siempre se ha partido la cara por mí con los jefes y con Madrid, pensad que hay mucha gente allí que no me quiere y ella siempre se ha partido la cara por mí. Mi manera de recompensarle es llevar exclusivas al programa y sobre todo haciendo que el programa mejore día a día, poniendo todo de mi parte. Nando Escribano… no le considero solo mi jefe, le considero un amigo especial. En general todos, la coordinadora Irina, todos.
¿Qué tal es la relación con tus compañeros de ‘Cazamariposas’? Con la redacción es buena. Lo único con María Lapiedra, me ha decepcionado. Entre compañeros nos tapamos muchas cosas, pero no solo aquí, en todos los programas y en todas las empresas. Cuando hay una amistad y tú te enteras de cosas, pues oye, las tapas. A María yo le he tapado ciertas cosas importantes en estos últimos tres meses y me ha demostrado que a ella lo único que le interesa es la televisión. No sabe lo que es una amistad, pero no me voy a ceñir con María Lapiedra, que parece que hay veces que la tratamos como si fuera Madonna y al final lo único que hace y ha hecho en su vida, que es por lo que se la conoce nada más, por sus relaciones sexuales con conocidos. La relación es buena, muy buena con todos mis compañeros, menos esta excepción.
¿Tienes material de alguno de ellos que si sale a la luz nos dejaría asombrados? No. No lo haría jamás. Nunca haría material de alguno de mis compañeros de programa.
Si te dieran la opción de trabajar como colaborador de ‘Sálvame’ pero con la condición de dejar ‘Cazamariposas’, ¿qué harías? ¿Por qué? No lo haría. En la vida no todo es dinero. Para mí, ‘Sálvame’ es un programa que tengo una relación con ellos de amor-odio. Al principio empecé muy bien, luego la relación fue nula y he estado vetado durante muchísimo tiempo. Ahora parece ser que voy a ir a ‘Sábado Deluxe’ una vez al mes, se empieza a abrir un poco la esperanza y la luz, pero a mí en el diario me han dado y me han atacado muchísimo. Uno en la vida tiene que tener valores. Mis valores y principios me dicen que ‘Cazamariposas’ es el programa que más me ha dado cariño y me ha protegido, es al que yo me debo. A mí puede venir ‘Sálvame’ o el que sea, que si me hacen elegir, yo no me muevo de mi programa.
¿Por qué quieres presentarte a ‘Supervivientes’? Es una oportunidad, sobre todo para tener más visibilidad televisiva. El mundo de la televisión hoy en día va un poco de la mano con el marketing digital. Si tienes más visibilidad y tienes un programa que lo ven 2 o 3 millones de espectadores, luego eso se incrementa en publicidad, marcas y cosas. Yo quería ir un poco por ahí, el reto y tal está bien. Cuando la gente me dice: “yo quiero ir por vivir la experiencia”, me pregunto: ¿qué experiencia? Pues te coges un avión, te vas México tres meses y vives la experiencia. Yo creo que la gente va por el dinero y yo hubiera ido por él, porque pasar dos meses hambre no me apetece nada.
¿Qué juego darías en la isla? Muchísimo, el que más. Quien me conoce sabe que soy un show man y si le añades que tengo hambre, frio por las noches… imagínate cómo es eso. Pero bueno, no soy yo el que toma la decisión y el que la toma parece ser que no está muy por la labor.
¿Qué te parecen los concursantes confirmados de ‘Supervivientes’? La lista de concursantes de ‘Supervivientes 2018’ la veo floja, me hubiera apetecido ver a personajes con más actualidad y más jóvenes.
¿Por qué crees que se te han cerrado tantas puertas? Es verdad que en la ‘Sálvame Snow Week’ tuve una actitud muy negativa. Cuando se han abierto cruces con ‘Sálvame’ yo he fallado. He amenazado en sacar cosas oscuras de los colaboradores y eso es un fallo garrafal, porque yo también tengo cosas oscuras y aquí podemos sacar todos de todos. Ha habido miedo a llevarme y a que puedan ocasionarse enfrentamientos muy fuertes en plató y no se me da esa confianza. Llega un punto que cuando llevan muchos meses diciéndote que no (recalca) y te dejas la vida dando exclusivas en ‘Cazamariposas’ y muchas de ellas son pelotazos de ‘Sálvame’ y ves que no te dan la oportunidad pierdes la ilusión. El otro día puse el ejemplo a uno de los jefes: tengo la sensación de que voy en un barco y el barco se hunde. En vez de ahogarme decido nadar hasta ver donde llegan mis fuerzas. Cuando estoy viendo la orilla las fuerzas ya me empiezan a fallar y ya decido no llegar a ella. Eso me está pasando, después de un año llamando a la puerta, ahora que ‘Sábado Deluxe’ me está dando la oportunidad, te juro a día de hoy que no me ilusiona. Es más, que voy un sábado, pues voy, que no, pues me da igual. Estoy desilusionado y con desgana.
¿No crees que ‘Cazamariposas’ te haya dado esa ilusión que estabas perdiendo? ‘Cazamariposas’ me da cada día la ilusión. Ese esquipo está todo el día encima de mí constantemente. He hecho cosas que en otra empresa me habrían despedido fulminantemente. Me dan confianza pero al final, en la vida, el objetivo es ascender y progresar y a mí me gustaría hacerlo. Lo he hablado con todos y ellos me entienden, es como si juegas en el Betis y te llama el Barça o el Real Madrid, ¿te gustaría irte verdad? Pues esto es lo mismo. No me gustaría dejar ‘Cazamariposas’ pero en su día me hubiera gustado compaginarlo, dos días a ‘Sálvame’, tres a ‘Cazamariposas’ o viceversa. A día de hoy, te lo juro, que si vienen los jefes y me dan cuatro días de ‘Sálvame’ a la semana, tres o hasta dos, yo lo rechazo. Voy a seguir en ‘Cazamariposas’ por tener un poco de visibilidad televisiva, para que el personaje no muera y porque no puedo dejar tirada a esa gente. No puedo dejar tirada a Nuria Marín porque sé que ella me ha hecho ser importante en el equipo y sé lo importante que soy en ese programa.
¿Es diferente el Jordi que vemos en televisión a detrás de las cámaras? Que va, es el mismo. Detrás del paparazzi polémico, se esconde una persona con una gran sensibilidad, muy frágil, y que lleva consigo una coraza de hierro, que detrás d ella hay un niño grande. Para mí, cada vez que he tenido una crisis y me han dado ganas de dejar la productora, los primeros que han estado encima han sido el equipo de ‘Cazamariposas’, pero los segundos los jefes, nunca han permitido ni una vez que me vaya. El otro día lo dije en ‘Sábado Deluxe’ hay personas en La Fábrica de la Tele que yo les debo todo y es una productora que aunque ‘Sálvame’ sea de la misma y no lleven, la gente que no me lleva allí no son los jefes a los que yo les tengo tanto cariño. A Oscar Cornejo y a Adrián Madrid les estaré siempre muy agradecido porque ellos fueron los que me dieron la oportunidad de volver. Miquel Ramells junto a Nuria son de las personas que más encima están de mí. Si no fuera por ellos no estría trabajando en televisión. La Fábrica de la Tele es una familia. La gente que trabaja en ella tiene una calidad humana muy grande. Yo siento el cariño y el respaldo de la productora y lo agradeceré siempre (recalca).
¿Cuáles son tus planes de futuro profesionales? Mis planes son dejar la televisión, me ha agotado. Me estoy metiendo en el mundo empresarial, estoy creando un start up y mi idea es introducirme en un sector totalmente nuevo que me ilusiona y apasiona. Creo que en la vida todo es cíclico y todo son etapas y hay que sacarle todo lo bueno a estas. La etapa de paparazzi no la doy por cerrada, pero el mundo de la prensa escrita está cayendo en picado a una velocidad de 500 mil kilómetros por hora y se acaba (recalca). No sé lo que durará, llevo diez años en esto, si la etapa dura doce años la valoraré de una manera muy positiva. Ahora, trabajando en televisión no me veo el resto de mi vida. Entiendo a Kiko Matamoros cuando deja la televisión y dice que le apasiona jugar al mus y conocer a otra gente. La televisión agota y a mí realmente me agota. Sobre todo me desilusiona el hecho de un año entero estar tocando puertas a ‘Sábado Deluxe’. ‘Sálvame’, sabiendo el potencial que tengo. Al final cuando todos los jefes te dicen: “tienes un potencial enorme”, sí, vale, lo que tú quieras, pero no me llevan. Cuando estás cansado de ir detrás porque muchos colaboradores me lo dicen: “es que tú aquí darías muchísimo juego”, sí, pero no me llevan. Me da pereza el mundo del corazón. Me apetece mucho entrar en el mundo empresarial y conocer otro tipo de gente sin desmerecer por supuesto a los actuales compañeros y amigos que tengo dentro de este mundo tan bonito en el que estoy.
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